Consigue tu armario perfecto
Consigue tu armario perfecto
No es lo mismo el armario para una mujer que viste solo faldas, o el de una adolescente que se pone pantalones un día sí y otro también. Depende mucho de la persona de la que estemos hablando para adecuar bien un armario.
Por tanto, uno de los primeros puntos antes de ponerte a crear el armario perfecto para ti, es analizar qué tipo de ropa te sueles poner y qué accesorios guardas en tus armarios. Una vez tengas eso claro, empezamos a trabajar para que consigas el armario perfecto.
3 pasos para conseguir el armario perfecto
Una vez que hayas analizado cómo este tu armario actual y qué es lo que sobra y lo que falta, podemos meternos a preparar el armario perfecto para toda tu prenda y accesorios.
Elige las medidas adecuadas para las barras
Para aprovechar al máximo el espacio disponible en tu armario, es imprescindible que las barras tengas las medidas adecuadas.
Según los expertos, estas serían algunas de las medidas recomendables:
– Para prendas largas como abrigos, trajes y vestidos, necesitarás espacios de entre 130 y 170 cm.
– Para cazadoras y pantalones sin doblar, entre 100 y 130 cm.
– Para camisas, blusas y chaquetas cortas, entre 90 y 120 cm.
– Para pantalones doblados, faldas y prendas muy cortas, entre 60 y 90 cm.
Coloca cada prenda en su percha
No todas las perchas son iguales, y tampoco las prendas son iguales. Por ello, tienes que saber dónde guardar y colgar cada una de ellas:
para guardar pantalones doblados, usa las que tienen soporte de sujeción; en el caso de faldas y vestidos con tirantes, con pinzas; y para las chaquetas y abrigos, lo ideal es colgarlos en perchas grandes y robustas.
No dejes nunca de lado las camisas o los vestidos con mangas. Estas son las prendas más complicadas. Lo mejor que puedes hacer para guardas es utilizar las perchas de tamaño normal, las de toda la vida.
Incorpora baldas y cajones
Hemos hablado de pantalones, chaquetas, camisas o vestidos, pero nos quedan los jerseys, las camisetas y los bolsos, por ejemplo, accesorios que no se cuelgan o no acostumbramos a colgar. Para guardar este tipo de prendas y accesorios lo mejor es que insertes unas baldas y cajones.
También sirven para guardar la ropa de casa, como sábanas y mantas.