Decorar dormitorios juveniles
Decorar dormitorios juveniles
La decoración del hogar, en general, es un tema difícil, pero, más quebraderos de cabeza nos produce decorar un dormitorio, y aún más, si esa habitación es de un joven. El dormitorio es el lugar de la casa donde descansamos y dormimos, es un espacio donde guardamos nuestras intimidades y secretos. Sobre todo cuando somos jóvenes, el dormitorio se convierte en nuestro refugio… donde nadie puede entrar. Empezar a decorar una habitación así es una tarea de lo más complicada.
Lo fundamental para que termines con un dormitorio perfecto es tener un buen criterio a la hora de decorarlo. Para ello, no solo basta con que tú escojas los elementos que a tu sano juicio quedarían mejor, sino que la opinión del joven tiene mucho que aportar en este tema. Date cuenta de que el dormitorio es la txabola del joven, su refugio, donde se siente con toda la libertad de expresar sus sentimientos y reflexionar acerca de sus actos y el futuro. Por esta razón, la decoración de su espacio más íntimo tiene que salir, en su mayoría, de las decisiones del joven.
En este sentido, la decoración de dormitorios juveniles tiene que contar con la presencia constante del joven propietario de la habitación y, a partir de ahí, empezar a tomar las decisiones todos juntos. No hay un estilo predeterminado de dormitorios juveniles, ya que cada joven es un mundo, y sus gustos, especiales. La decoración de este tipo de dormitorio, en cambio, resulta más fácil que una habitación infantil, en la que los niños viven en una etapa en la que los gustos e intereses van cambiando muy a menudo.
Los colores y el estilo son variables según el tipo de joven con el que nos encontremos, pero hay elementos que no pueden faltar en un dormitorio juvenil. Un buen dormitorio tiene que ser confortable, cómodo y dar ciertas prestaciones. Los jóvenes están sumidos en una vida llena de rutina, la que les lleva a estudiar la mayoría del tiempo y estar frente al ordenador. Por lo tanto, algo imprescindible en un dormitorio juvenil será un escritorio amplio y cómodo, con el tamaño suficiente para soportar un ordenador portátil, libros, cuadernos y un flexo para estudiar. Asimismo, una silla de estudio cómoda y buena para cuidar de su espalda.
El tamaño del dormitorio es hoy en día irrelevante, ya que tenemos a nuestra disposición muchas fórmulas para que una habitación pequeña no tenga problemas para equiparse de una manera confortable. Un dormitorio juvenil, por tanto, deberá ir equipado de una cama, un escritorio amplio, unas estanterías donde colocar los libros y objetos personales, y un armario lo suficientemente grande como para guardar toda la ropa de un joven. De esta manera, conseguiremos el refugio que cualquier joven querría tener.